
¿Nunca os ha pasado que calculáis que un día va a ser tranquilo y de repente os vienen a la cabeza un montón de cosas pendientes? Pues eso me pasó a mi ayer. Pensaba que iba a tener un lunes de “no hacer nada” y, a última hora, me di cuenta que tenía que hacer mil y una cosas. Pero bueno, nada que no se arregle con un poco de organización. La receta que os traigo hoy no os quitará mucho tiempo, es muy sana, deliciosa y sencillísima. Lo bueno de hacer las cosas al horno, además de utilizar menos grasas, es que mientras se hacen podemos dedicarnos a otras cosas, de esas que surgen inesperadamente.
Ingredientes (para 2 comensales):
- 2 caballas hermosas.
- 4 patatas medianas.
- 1 cebolla.
- Mantequilla.
- Aceite de oliva, sal, perejil.

La receta de hoy es de esas que con pocos ingredientes se consigue un plato estupendo. A veces, en la cocina, menos es más, y no por utilizar muchos ingredientes o muy sofisticados se consiguen mejores resultados. Durante este tiempo, que llevo compartiendo recetas con vosotros, he aprendido que la cocina sencilla es muy gratificante a la hora de sentarse a la mesa y que debemos practicarla. Eso no quita que, de vez en cuando, preparemos una receta que nos apetece, aunque eso signifique pasar horas trabajando. A mí particularmente, me encanta hacerlo.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 1 pollo entero troceado.
- 5 zanahorias.
- 2 cebollas.
- 200 ml. de vino.
- 500 ml. de nata para cocinar.
- Harina.
- Aceite de oliva, sal, pimienta y nuez moscada.

El nombre de estos dulces en realidad debería ponérmelo a mi misma porque la golosa soy yo, lo confieso. Cada día disfruto más haciendo dulces y viendo las caras en casa cuando los comen, a fin de cuentas, la mayor recompensa que tiene pasar horas en la cocina es ver las caritas de disfrute en casa, aparte de la satisfacción personal de hacer cosas, aprender, innovar…
Estos lacitos son muy sencillos de hacer y han surgido en un arranque de “golosonería” de los que se sufren a veces cuando menos te lo esperas. Igual es cuestión de hormonas o algo físico por una bajada de azúcar, la cuestión es que, a veces, solo soy capaz de pensar en dulce, y estos hojaldritos son el resultado.
Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre (la mía de Lidl, soy fan).
- Leche condensada.
- Miel.
- Agua.
- Azúcar glass.
Se nos escapa otro mes. Yo no se a vosotros pero a mi, el tiempo me vuela. Pasan los días, las semanas y los meses a una velocidad de vértigo. Dentro de nada estamos ya pensando en que poner en la maleta para las vacaciones. En fin, vamos a centrarnos en el día de hoy para disfrutarlo y saborearlo a tope. Os dejo el menú-tupper para la semana que viene. Espero que os guste.
Lunes 28 de Mayo-2012: Espaguetti Hot Dog.
Espaguetti con salchichas Frankfurt y salsa de tomate casera.

Martes 29-Mayo-2012: Rollitos de tortilla rellenos de verduras.
Rollitos de tortilla con calabacín y zanahoria.
Miércoles 30-Mayo-2012: Pechugas tropicales.
Pechugas de pollo troceadas guisadas con piña en su jugo, con guarnición.
Jueves 31- Mayo -2012: Ensalada de alubias.
Ensalada de alubias blancas con maíz y langostinos.
Viernes 01-Junio -2012: Atún con pisto.
Atún fresco en dados guisado con pisto.
Como veis, algunos de los tupper de esta semana pueden tomarse fríos, a ver que temperaturas tenemos.

Esta tarta es una joya y, aunque lleva un tiempo de elaboración, yo lo preparé todo por la mañana y la horneé a la hora de cenar, la comimos recién hecha sin que me robara demasiado tiempo. Nos ha encantado, tiene un sabor increíble, no resulta pesada y es una cena perfecta. No dejéis de probarla.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 1 lámina de masa quebrada (la mia de Lidl, me encanta).
- 1 pimiento rojo pequeño.
- 1 pimiento verde pequeño.
- 1 pimiento amarillo pequeño.
- 1 berenjena.
- 6 tomates cherry, 12 mini tomates pera y 6 tomates cherry amarillos.
- 2 cebollas.
- 2 puerros (la parte blanca).
- 2 cucharadas de azúcar moreno.
- 200 gr. de requesón.
- 150 gr. de gorgonzola dulce.
- Mozzarella rallada.
- Aceite de oliva, sal y hierbas provenzales.

Reconozco que me gusta probarlo todo. Cuando voy a la compra, si veo algo nuevo, no puedo resistirme. El otro día en Lidl vi este paquete de pasta al ajo de oso y lo compré.

Después, en casa, me informé de qué es el ajo de oso y empecé a maquinar la receta que iba a hacer con ella. No me apetecía hacerla con tomate ni con queso, eso ya lo uso en otro tipo de pasta más “normal” y hablando con Miguel decidimos potenciarle el sabor que de por sí ya tiene esta pasta. Este sabor a ajo no es muy intenso, si probáis la pasta simplemente cocida se aprecia un regusto de fondo pero solo eso. Bien, aquí os dejo el resultado de la prueba…muy rica, cualdo vuelvan a tenerla la compraré.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 500 gr. de pasta al ajo de oso.
- 200 gr. de gambas crudas peladas.
- 150 gr. de gulas.
- 3 dientes de ajo.
- Aceite de oliva, sal y cayena molida.
